Iglesia de San Pedro de los Francos de Calatayud

Arte
Parte trasera de la Iglesia

Parte trasera de la Iglesia

Coordenadas geográficas: -1º65'67", 41º35'33"
Coordenadas UTM (ETRS89 H30): 613586, 4579079

Reconquistada Calatayud a los musulmanes en el año de 1120, Alfonso I el Batallador fundó un templo bajo la advocación de San Pedro para que sirviese como parroquia a los francos de Bigorra, que le habían ayudado en la conquista bajo el mando del conde Alperche. Por el origen de sus feligreses, y para diferenciarlo de otro templo conocido como San Pedro de Serranos, recibió la denominación de San Pedro de los Francos.

La iglesia ha fue declarada Monumento de Interés Histórico-Artístico con fecha de 1931. En el año 1978 se constituyó formalmente en este templo la Diputación General de Aragón, hecho histórico importante y relevante ya en época Contemporánea, desde esa fecha hasta el año 2006 San Pedro de los Francos ha estado cerrada, se finalizó la restauración en la mencionada fecha y actualmente es un aula cultural, dedicada para actos culturales como pueden ser: conciertos de órgano, exposiciones de cuadros, congresos, conferencias...

La iglesia es de estilo gótico, del año 1300, posee una planta de tres naves, casi de la misma altura, con crucero no acusado en planta y con triple ábside poligonal en el testero. La nave central, es de casi doble anchura que las laterales, hallándose separada de éstas por columnas fasciculadas. Cubren las tres naves bóvedas de crucería simple, de nervios diagonales. Las bóvedas de los ábsides laterales tienen doble clave, mientras que en el ábside central los nervios confluyen en una clave común. Los capiteles de las cuatro grandes columnas fasciculadas carecen de decoración vegetal de cardinas, siendo de una extraordinaria sobriedad al presentar un perfil tronco cónico invertido y liso, que puede relacionarse con los capiteles del claustro de Santa María de Calatayud. En la portada, a los píes del templo se utiliza como material la piedra sillar, es de tipo gótico levantino, muy sobria, abocinada y formada por seis finos baquetones. Adosados a las jambas y bajo doselete, las esculturas de San Pedro y San Pablo y en el tímpano Cristo en Majestad acompañado por la Virgen y San Juan. A los pies de la iglesia, se levanta la torre de planta cuadrada cuya estructura es la característica de las torres mudéjares aragonesas de fines del siglo XIV y primera mitad del XV: se trata de una torre exterior envolviendo a un machón central totalmente macizo, desarrollándose entre ambos el cuerpo de escaleras cuyo sistema de bovedillas cierra por aproximación de hiladas de ladrillo.

En el interior del templo lo más destacable: El retablo mayor, de escultura, es obra barroca del año 1669. Dedicado a San Pedro, consta de banco y tres calles separadas por columnas salomónicas de uvas, apeando las laterales sobre ángeles tenantes. En el banco, relieves con escenas del Lavatorio de los pies y Entrega de las llaves a San Pedro. En la calle central, San Pedro en la cátedra. El píe de órgano, de finales del siglo XV, extraordinaria obra de carpintería mudéjar del taller de Calatayud, cuyos motivos decorativos se relacionan con las yeserías de la bóveda de la capilla lateral de Nuestra Señora de la Peña.