- Travesía
- 1
- 1
- 1
- 3
- 4h 40'
- 17,2 Km
- 20 m
- 375 m
- Tipo de recorrido
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- El medio no está exento de riesgos
- Hay más de un factor de riesgo
- Hay varios factores de riesgo
- Hay bastantes factores de riesgo
- Hay muchos factores de riesgo
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- Caminos y cruces bien definidos
- Sendas o señalización que indica la continuidad
- Exige la identificación precisa de accidentes geográficos y de puntos cardinales
- Exige técnicas de orientación y navegación fuera de traza
- La navegación es interrumpida por obstáculos que hay que bordear
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- Marcha por superficie lisa
- Marcha por caminos de herradura
- Marcha por sendas escalonadas o terrenos irregulares
- Es preciso el uso de las manos para mantener el equilibrio
- Requiere pasos de escalada para la progresión
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- Hasta 1 h de marcha efectiva
- Más de 1 h y hasta 3 h de marcha efectiva
- Más de 3 h y hasta 6 h de marcha efectiva
- Más de 6 h y hasta 10 h de marcha efectiva
- Más de 10 h de marcha efectiva
- Horario completo de la excursión
- Distancia horizontal recorrida
- Desnivel de subida acumulado
- Desnivel de bajada acumulado
Descripción
Arranca la etapa desde la plaza de la iglesia de Sisamón (1.050 m), localidad que se abandona por su extremo norte, entre sus bodegas y campos de cultivo. Así se llega a un primer cruce que enlaza con la colada de Sisamón (0,6 km; 10 min) y se sigue hacia el NO (derecha), a lo largo de un paisaje agradable y abierto, desde donde se pueden observar -si se mira hacia atrás- los restos conservados de su castillo.
La ruta discurre por la colada de Sisamón donde se asientan las ruinas de distintas parideras y corrales en las partidas de La Soriana al O (izquierda), El Caladizo, La Dehesa y El Pericón, al E (derecha). De esta se alcanza la balsa de la Medialegua y un tramo después un cruce donde arranca una pista a la izquierda que debe ser obviada. El PR-Z 91 prosigue de frente entre campos de labor y, enseguida, deja a la derecha el navajo o balsa de las Cabezuelas y poco después una construcción de monte a la izquierda y la paridera de las Cabezuelas al E (derecha), al igual que el barranco de Valdaroque. Flanqueado por carrascas el recorrido gana un cruce, desde donde se sigue hacia el NO (izquierda). A partir de ahora el camino deberá superar numerosos cruces, por lo que será necesario observar con suma atención la señalización existente. Poco después se llega a otro cruce (6,9 km; 1 h 30 min), donde se ubica el navajo o balsa de la Calzada a la derecha del camino, en el lugar conocido como La Calzada, que en realidad es un enorme campo que hay que bordear.
A partir de este punto el recorrido tiende hacia el N (izquierda), primero entre campos de labor y tras unos 400 m se interna en la sierra de Solorio, donde se puede disfrutar de bosques de carrascas, así como de algún ejemplar de sabina monumental. Así se alcanza otro cruce (7,7 km; 1 h 40 min), desde donde continúa al NE (derecha), dejando al O (izquierda) el Parral (942 m) y el cerro Coscorín (934 m). El recorrido avanza por los términos de Las Matillas, La Coscorina y el Cado del Gato hasta alcanzar el collado de los Rubiales (899 m; 10 km; 2 h 15 min).
Prosigue el PR hacia el NO (izquierda), a lo largo del camino de Calmarza hasta alcanzar un cruce que se sigue a la derecha y que conecta con el inicio del camino de la Era Empedrada (10,9 km; 2 h 30 min), donde el camino continúa la dirección NO (izquierda) entre campos de cultivo y algunas carrascas salpicadas. De esta manera la ruta cruza un puente sobre las vías del AVE (12,8 km; 2 h 50 min).
Tras dejar atrás las vías del tren, el recorrido conecta poco después con el camino de Jaraba (derecha) y sigue recto por Carramolina, antiguo camino a Molina de Aragón por Calmarza, en continuo descenso hacia el barranco de San Lázaro. Una vez vadeado el itinerario avanza por la pista hasta la carretera Z-V-4501 que viene de Sisamón (16,3 km; xxx h). Prosigue a la derecha por ella y, en unos 700 m, alcanza la localidad de Cetina (685 m; 17,3 km; 3 h 50 min).